jueves, 12 de septiembre de 2013

Rompiendo prejuiccios


El músico es llamado a la música. Luego tiene que adquirir la suficiente habilidad para llevar su trabajo a cabo, para desarrollar su don; y por último tiene que estar dispuesto a ponerlo al servicio de los demás.
Este camino está plagado de prejuicios internos y externos que tratarán de que no llegue a su fin.

El propósito es enumerar algunos de estos prejuicios y la forma de eliminarlos: encontrar un hecho que lo destruya.
Pongamos un ejemplo; uno de los primeros prejuicios que tenemos que atravesar es el tamaño de las manos. Dedos “gordos como morcillas” o “manos pequeñas” no son muy queridos por el equivocado criterio común. Basta ver las manos de BB King o Elton John para dar por tierra con esta creencia convincente pero falsa.
Otro muy común es el de creer que los buenos músicos nunca se equivocan, que son una especie de semidioses .separados por un abismo de nosotros. Puede sonar absurdo, pero si nos sentimos derrotados cuando algo sale mal es que lo creemos en nuestro inconsciente...
Yo sufría de este mal en mis sesiones de práctica hasta que un día mirando un video-clase de un famoso pude romperlo. ¿Cómo? El protagonista tocaba un ejercicio. En eso se equivoca, se ríe y lo corrige. Nada más simple. Agradezco a este artista que tuvo la delicadeza de no borrarlo y editarlo con el error. Se  mostró tal cual era: un humano que trabajaba con seriedad y sentido del humor. Es muy liberador sacarse el enorme peso de la perfección absoluta. Si,  los genios se equivocan. Obvio que también lo arreglan...
Otra experiencia muy importante para mí fue ver en el Teatro Solís a un trompetista llamado Jimmy Owens, en concierto. El espectáculo fue tremendo, alucinante. Luego fue a un boliche a divertirse con músicos uruguayos tocando destensionadamente. Ahí ya no era una estrella sino un músico que tocaba algunas frases muy buenas y otras no tanto. Entonces comprendí que en Solís todo era perfecto porqué estaba muy bien preparado; y realizado a un nivel de concentración importante. O sea trabajo y performance. No magia...
A continuación haremos una tabla de prejuicios en la música y su antídoto.

Prejuicio
Hechos reales
Dedos gordos no sirven
Ver a B.B. King
Manos chicas no sirven
Ver a Elton John
Los grandes músicos son semidioses
Trabajan
No poner el pulgar encima del mástil.
Está bien en la guitarra clásica; pero es imposible tocar técnicas de blues (ej. "Bends") sin apoyar el pulgar.
Identificar un prejuicio
Buscar cómo romperlo












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